Al parecer el señor anónimo o los señores anónimos, insitirán en esconderse, sin embargo, la contundente respuesta por parte de los columnistas , obtuvo que al menos esgrimieran sus arteros manotazos en un texto mas elaborado y con evidentes muestras de preocupación, lo que estimamos es un avance y nos sentimos partícipes de proporcionar a esta o estas personas la motivación para observar en el plano de la argumentación lineamientos para su actuar.
El oportuni$mo de estos personajes nefastos que con un móvil evidentemente antisindicalista y un desconocimiento absoluto de la realidad sindical y sus organizaciones ,alzan la voz para atacar una organización que ha sido leal con sus socios y sin perjuicio de que el resto de los trabajadores pertenezcan a otra razón social también ha sido solidaria con ellos, presentando diversas problemáticas en conocimiento de las autoridades y gestionando soluciones para determinados casos.
En el caso de SUDLA, su arranque fundacional no podía limitar su función a la exclusividad de los socios , entendiendo la orfandad implacable del resto de las razones sociales del Holding, la presentación a las autoridades subrayó la preocupación por la totalidad de los trabajadores y trabajar por ellos pese a la fuerte presencia de elementos antisindicalistas, el desarme del organigrama de la época Antillo, la potenciación del miedo por el desconocimiento de la realidad de un sindicato y la precariedad patrimonial de una organización que no recibe ningún tipo de ayuda y se financia excusivamente en base a la autogestión.
Pese a todos estos obstáculos, ajenos al sentir de la mayoría de trabajadores, acorralados por el chantaje de la continuidad laboral y la acción de sujetos, como los anónimos artilleros en cuestión, la labor sindical debe enfrentarse a elementos que, desde los exteriores y parapetados en las barreras de la inanición, sin enfrentar riesgos de ningún tipo - salvo el correctivo ético proveniente de quienes se jugaron el pellejo y arriesgaron todo, por dar forma a una voz de dignidad y representación de los trabajadores- se permiten cuestionar la honestidad de su accionar.
En primer término, los cuestionamientos, no pertenecen a un socio, ya que éstos se pronuncian en Asamblea y a través de los medios comunicativos pertinentes, por lo tanto si nos molestamos en contestar es porque la honestidad de la directiva no puede ser enlodada por ajenos a la organización y contaminar a potenciales socios con disensos destructivos y de oscura motivación, que mas que reforzar la organización pretenden culpar al sindicato por las injusticias y el maltrato sistémico que reciben los trabajadores, las trabas amañadas de la ley para reducir la expresión sindical a una ornamentación formal para apellidar la supuesta democracia de este país.
Sin perjuicio de lo anterior, se reconoce el derecho a presentar observaciones y juicios por parte de toda la comunidad, e incluso como se aclarará mas adelante se admiten las conclusiones de su averiguación, pero el contexto para emplazarla, es evidentemente tendencioso, parcial y subordinada a una posición antisindical inaceptable, además de evidenciar una deficiente lectura del fondo del texto y adelantar conclusiones infundadas.
El interés por elevar inquietudes pro-trabajadores, sindicales, etc. es una necesidad urgente al interior de las empresa y SUDLA desde su inicio ha intentado integrar y lograr un trabajo participativo, quien quiera aportar y encauzarse en esta lid es bienvenido pero desde adentro y no a los empujones ni menos de manera anónima, pues ello no ayuda a mejorar las condiciones socioeconómicas, sólo genera animosidades y luchas intestinas que retardan los objetivos fundamentales, la unión y la solidaridad.
SUDLA no oculta nada y los datos proporcionados en el texto al cual se remiten los oportunistas comentarios fueron proporcionados por la empresa.
SUDLA no reajusta sueldos, sólo entregó a la interlocución designada, el parecer de sus socios ante comentarios que indicaban reajustes inferiores al IPC 2007 ( 4%), teniendo plena claridad del concepto del acuerdo tácito sin escriturar. Debido a esto, sin Contrato Colectivo en curso y para evitar la prolongación del reajuste y el consabido enmarañamiento legal, perjudicial para los trabajadores, SUDLA se adelantó al probable escenario de un reajuste inferior al acuerdo tácito y el retardo de un pronunciamiento de la DGT. En tal sentido, la empresa nos informó que el reajuste para los trabajadores con ingresos inferiores a $700000 sería del 7.8% y aprox. 4% para los sueldos superiores a la cifra aludida. Además reconoció la oportuna presencia del sindicato para la materialización de tales incrementos. Ahora bien, la información que SUDLA publicó en el blog es información entregada por la empresa y salvo la objeción anónima, no hemos recibido datos contrarios a lo expresado.
La primera conclusión al respecto es que gracias a la confortable maniobra de denunciar sin participar como socio o al menos como simpatizante, la accion de SUDLA se limita ya que no cuenta con la totalidad de los datos lo que permitiría un seguimiento mas acucioso de las denuncias y así representar las anomalías respectivas.
Cuando el anónimo plantea que la empresa debe informar o tiene la obligación de informar del acontecer institucional, surge la pregunta ¿ tiene usted la evidencia de que alguna vez lo han hecho?, excepto, claro, para entorpecer la labor sindical, cuando se declaró Período No Apto para Negociar durante 2007, hecho que al parecer a usted no lo movió al mas mínimo rechazo.
SUDLA, en este blog permantemente ha comentado y recibido los aportes de todos quienes de manera responsable y constructiva desean pronunciarse acerca de la realidad institucional .
En especial en los arbitrarios despidos de 2008, SUDLA presentó a las autoridades su rechazo e hizo pública su postura en en un Comunicado Oficial sin adornos y en pleno uso de la prerrogativa de la Libertad Sindical.
Este hecho encontró resistencia en algunas autoridades que hicieron a un lado la careta de la convivencia amistosa y pusieron en la mesa toda la prepotencia patronal, característica del empresariado neoliberal y sus ramificaciones con cargos jerárquicos.
Los despidos, la incertidumbre y el clima laboral paupérrimo, son temas de constante preocupación por parte de los trabajadores y SUDLA mantiene en la tabla de reuniones ordinarias con la empresa la vigencia de los puntos enunciados y debate la realidad institucional en la mas completa sordera de la empresa. Esto cambiaría y la empresa prestaría una atención integral y no meramente convencional hacia la gente, si el ánimo motivacional que su ejemplo describe, señor anónimo, se sumara al ánimo constructivo y colaborador de los socios de SUDLA.
La Directiva de SUDLA, ante la falta de respuestas de la interlocución gestiona audiencia con el Rector para tratar de obtener información genuina de cuál es finalmente el futuro de la empresa y las implicancias definitivas para los trabajadores. Comento esto para graficar que SUDLA, es la única instancia que permite acercarse a las autoridades y conversar sin inhibiciones, pero que requiere de la unidad y la organización para hacer uso real y efectivo de su concurso en el diálogo laboral.
Con motivo de la suspensión de clases como consecuencia del denominado Día del Joven Combatiente las clases se suspendieron a las 14:25 y no existía claridad con respecto a la salida de los funcionarios, ¿Quién piensa usted planteó igualar el concepto de la seguridad entre los estudiantes y trabajadores y permitir la salida a las 17:00 hrs.?
SUDLA hizo la presentación, pensando en todas las personas que salen a las 22:00 hrs.
El CMPHS, Los Uniformes, la solicitud de revisión de los beneficios de la refundación, etc. son ejemplos de la labor de SUDLA y mucho mas se podría hacer si la gente comprendiera la nobleza de esta labor y la legitimidad de la sindicalización.
Restarse a ser parte de la organización de los trabajadores sólo ayuda a caminar hacia el lado y mirar desde la ventana, no tienen autoridad moral para exigir, aquellos que ante las numerosas invitaciones a participar, a utilizar los medios comunicacionales disponibles para aportar, sumarse, sólo se inspiran para alegar por plata, cuando nunca hicieron otro aporte para ayudar al crecimiento y al fortalecimiento del sindicato.
Sabía usted señor anónimo, que en una negociación colectiva los beneficios obtenidos por los trabajadores producto de ella, son sólo para los socios del sindicato y que sólo bajo un resquicio ilegítimo, resabio de la Ley Laboral de la dictadura, se puede otorgar al resto de los trabajadores, pagando por la extensión del beneficio una cantidad de dinero al sindicato.
Sabía usted que los dirigentes de SUDLA durante 2006 y2007 donaron días de trabajo y por supuesto menoscabo en sus sueldos, ya que la empresa descontó las horas de los permisos sindicales.
Imagino que está en conocimiento que las horas descontadas deben ser pagadas por el sindicato y no cuentan con subvención alguna, excepto que sean parte de los puntos de una Negociación Colectiva.
Usted está en todo el Derecho de presentar las acciones que desee ante la Inspección del Trabajo, ya que al no ser socio de SUDLA, no le corresponde a esta organización representarlo, salvo por supuesto, que se haga parte de la organización y apoye con su trabajo la acción colectiva, con sentido constructivo y solidario.
SUDLA no discrimina y si usted o ustedes quieren debatir sobre la ética de los reajustes, el encarecimiento del costo de la vida, las restriciones impresentables a la labor de los sindicatos en Chile, la Ley Laboral retrógada heredada del Plan Laboral del Sr. José Piñera ex funcionario de la dictadura, la abusiva imposición del empresariado de determinar reajustes sobre la base del IPC, como si este medidor reflejara con fidelidad la disminución del poder adquisitivo, el reemplazo de los trabajadores en huelga, las empresas multirut, los grupos negociadores, sean Bienvenidos, pero no así, no desde el anonimato.
El trabajador y la historia lo constata, siempre enfrentó su realidad con el rostro descubierto y la frente alzada, los mártires de la Escuela Santa María y tantos otros que con sus vidas permitieron que los trabajadores ganaran derechos y que hoy en día, pese a los derechos conculcados por la dictadura y su sinedrín civil, aún nos quedan como legado de la convicción y la fraternidad.
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